Aguafiestas

Rosario Central llevaba ocho partidos sin conseguir triunfos y pudo romper con esa sequía justo contra un rival de importancia. Fue 2 a 1 ante River en un contexto que le da valor agregado por la fiesta preparada para la despedida de Marcelo Gallardo y en un estadio que, a lo largo de la historia, le ha costado ganar.

El equipo canalla hizo un correcto partido desde lo táctico, lo trabajó bien en la zona defensiva, fue inteligente, tuvo en Gaspar Servio a una de las figuras del partido y en Alejo Veliz, el oportunismo y la contundencia que se les pide a los delanteros.

Otro futbolista que completa el podio es Mateo Tanlongo, que si bien siempre es una opción para el mediocampo, fue un acierto de Tévez incluirlo como titular en lugar de Mac Allister ya que el juvenil tuvo una muy destacada actuación.

Sin dudas, sobre el final del encuentro, se desdibujó bastante todo lo realizado antes y Central terminó incómodo, con el resultado ajustado luego del descuento del local y los excesivos minutos agregados por el árbitro Echenique. Pero hay que marcar que le anularon dos goles (uno a Veliz y otro a Buonanotte) a instancias del VAR y que, nuevamente, su utilización dejó más dudas que certezas.

Central tuvo su premio, se llevó un triunfazo en medio de una fiesta ajena y le empañó la despedida a uno de los mejores técnicos de la historia contemporánea. Es para destacar la actitud de cada futbolista canalla al ir a saludar a Marcelo Gallardo cuando finalizó el partido. Eso marca la importancia y la jerarquía que le dio su trabajo al fútbol argentino.

Repasa acá el triunfo de Central en el estadio Monumental.